Por ENRIC BERENGUER
En este número hemos querido rememorar una fecha importante del siglo XX, la del final de una guerra que empezó al acabar la Segunda Guerra Mundial y terminó el 30 de abril de 1975, la guerra de Vietnam. Una guerra que implicó a dos países del llamado primer mundo: Francia como potencia colonial y Estados Unidos como baluarte anticomunista durante la «Guerra fría». Un Vietnam dividido por el resultado de la guerra de Indochina, entre el Vietnam del Norte, comunista, sustentado por la Unión Soviética y China, y el Vietnam del Sur apoyado por los países de su entorno, aliados de Estados Unidos, como Australia, Corea del Sur, Filipinas, Tailandia y otros. Una guerra que se expandió rápidamente a los países limítrofes, Camboya y Laos.
Una guerra larga, si aceptamos que la guerra de Indochina fue su preludio, desde 1946 a 1975, casi treinta años de dura guerra en la que murieron entre 4 a 5 millones de personas, siendo una de las más cruentas por el uso de material químico y bombardeos masivos.
Pero también fue la última guerra sin censura, los medios de comunicación tuvieron libertad para mostrar los aspectos más duros y los más simpáticos, los fotógrafos pudieron acompañar a los combatientes y así hacernos ver lo que era una realidad, la que se podía enseñar, pero absolutamente real. Fue el apogeo de una de las agencias de noticias más importantes, Associated Press, AP, dirigida como editor en la zona por uno de sus mejores fotógrafos, Horst Faas, él, como la mayoría de los fotógrafos de la época creía en una fotografía cruda, que enseñaba la dureza de una guerra desigual y mostraba al mundo que se sentaba delante del televisor aquello que los gobiernos no querían que se conociera.
En las fotografías se perciben los diferentes momentos del desarrollo del conflicto: el incidente del Golfo de Tonkin en agosto de 1964 representó el principio de la escalada militar de Estados Unidos. La población americana aceptó el principio de autodefensa y no se opuso en ese momento al incremento militar, el presidente Lyndon B. Johnson lo aprovechó para entrar plenamente en la guerra. Otra fecha de signo contrario fue la de la ofensiva del Tet del año 1968. Aunque acabó con el fracaso del Vietcong mostró al mundo su capacidad de actuar en cualquier zona de Vietnam y las muchas bajas que causaba hacía de los norvietnamitas un enemigo real. En Estados Unidos la opinión pública cambió, ahora se exigía en manifestaciones masivas el fin de la guerra. Era el principio del fin.
El momento final está perfectamente reflejado en dos fotografías: una de ellas de Hugh van Es, fotógrafo de origen holandés, que captó el vuelo del último helicóptero de rescate de la embajada de Estados Unidos. La otra muestra la entrada de un tanque norvietnamita en el palacio presidencial en Saigón.
También hemos querido mostrar un conjunto de fotografías menos conocidas, las del otro bando, las tomadas con intenciones propagandísticas por el gobierno de Vietnam del Norte, pero que manifiestan la seguridad en la victoria en la que creían para soportar una guerra tan larga y dura. En una de esas fotografía vemos a soldados del Vietcong y del ejército de Vietnam del Norte entrando en Saigón, se les ve sonrientes y bien uniformados, eran los libertadores. Esperamos que este material gráfico sirva para recordar esos años en que el enfrentamiento de las grandes potencias y de sus sistemas políticos se dirimía en países del entorno de cada uno de ellos y nunca entre ellos.